Como muchos compositores del siglo XIX, Brahms también se ganaba la vida dando clases de piano. Al hacerlo, reúne una colección completa de ejercicios, primero escritos ocasionalmente para sus alumnos y que luego intercambia con otros pianistas (por ejemplo, Clara Schumann). Es solo después de haber cesado en gran medida su actividad pedagógica y pianística que piensa publicarlo. En vista del grado de dificultad, propuso el siguiente título para la colección: "Todos los instrumentos imaginables de tortura, desde los pulgares hasta la virgen de hierro". Estamos publicando esta colección de ejercicios, esenciales para el juego romántico, como una edición de Urtext basada en el texto de "Neue Brahms-Gesamtausgabe" (nueva edición completa de las obras de Brahms).
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